Plegarias para la Presencia

Para simplificar nuestra vida

¡Oh, Dios! Llévanos de la vida superficial en donde hemos estado viviendo al interior del centro. Llévanos de la preocupación de nuestro auto contentamiento a Tu Santa Presencia donde deseemos únicamente guardarte fidelidad. Libéranos de nuestras apetencias para que puedas darte a nosotros. Porque en Tu presencia lo complejo se vuelve sencillo y las apremiantes actividades puedan con buena voluntad hacernos vivir de manera tan simple que con poco tengamos suficiente. Amén.

Para encender el anhelo espiritual

Padre Nuestro, ayúdanos a recordar Tu paternal ternura en cada momento de este día y mantén nuestros corazones bien henchidos de gratitud por Tu infinita complacencia. Intensifica Tu guía y Tus consejos en nuestros corazones hasta que su claridad no pueda ser desvirtuada, e inclina nuestra voluntad hacia ellos. Que un nuevo amor nos hermane con las almas de quienes nos rodean y danos paciencia para persistir en tal intento. Enciende en nosotros tal vehemente anhelo por Ti que su fuego ilumine cada una de nuestras obras. Amén.

Para ser canal de la Voluntad Divina

Danos, Amado Señor, la inflamada visión de esta vida de obediencia a TÍ. Quema, reseca y cauteriza sin cesar las complacientes y letárgicas normas de conducta que hemos utilizado hasta aquí para penetrar en nosotros e indúcenos a construir un nuevo anhelo lo suficientemente poderoso para servir de cauce a Tu infinito Amor y Poder. Abre mi vida y guía mis pensamientos hacia donde yo no me atrevo a llevarlos. Pero, TÚ, atrévete en mí, Señor, para que Tu Voluntad sea hecha. Amén.

Para que la Presencia viva a través nuestro

Dios amado, cruza las calles conmigo. Mira a través de mis ojos, habla a través de mis labios, muévete en mis brazos, anda con mis piernas y mis pies. Haz cada vez más sutiles las vestiduras de mi mente y de mi cuerpo que encubren Tu vida y Tu poder, hasta que yo me haya convertido en un lugar transparente y apacible donde Tú seas visible y en el que Tu infinito amor y paz puedan vivir para siempre reconciliados. Amén.

Para dar gracias por la Comunidad Bendita

Te damos las gracias, Señor, porque nos ofreciste la gracia de esta animosa compañía y nos diste la oportunidad de no hallarnos solos en el camino de nuestra salvación. Por la fidelidad de las almas en el Sendero y por su poderosa influencia en nosotros, te alabamos y damos las gracias, Señor. Amén.

Te damos las gracias, Señor, por la fraternidad de las almas en el Sendero. Sin su apoyo y fuerte abrazo apenas podríamos avanzar. Pero, con ayuda de ellas nos levantamos cuando caemos y hallan ellos a su vez en nuestras luminosas revelaciones los soportes de su propia regeneración cuando se hallan vacilantes, así nos animamos y sostenemos mutuamente en nuestro camino.

Te damos las gracias, Señor, porque nos ofreciste la gracia de esta animosa compañía y nos diste la oportunidad de no hallarnos solos en el camino de nuestra salvación. Por la fidelidad de las almas en el Sendero y por su poderosa influencia en nosotros, te alabamos y damos las gracias, Señor. Amén.

Para la atención, la serenidad y el correcto actuar

Oh, Bendito Compañero, pon en nuestras almas un freno santo por el cual podamos ser frenados cuando sea preciso detenernos y llevarnos adelante cuando sea conveniente hacerlo. Concédenos la gracia de estar atentos a Tu sabia dirección. Haznos dispuestos alegremente a dejar que los demás realicen sus propias tareas y a prepararnos sosegada y perseverantemente para aquellas que nos han sido confiadas de llevar a cabo lo mejor posible. Que podamos realizar estas cosas con mente tranquila, sabiendo bien que el que otorga la tarea es también el que otorga la fuerza para realizarla. Amén.

Fuente:

Kelly, T. R. (1941). Un Testamento de Devoción.